Piérdete en la colección de Carlos Monsiváis en el Museo del Estanquillo
El Museo del Estanquillo en CDMX alberga la exuberante colección privada de ‘alguien’. Pero no cualquier alguien, sino del buen “Monsi”. El alma insaciable del coleccionista y escritor Carlos Monsiváis se sabe que era motivada por “el hallazgo”.
En su frenesí coleccionista reunió más de 20 mil piezas entre fotografías, documentos históricos, pinturas, dibujos, grabados, partituras, caricaturas, miniaturas y maquetas. Y todo eso forma parte de la colección diversa del Museo del Estanquillo.
El Museo del Estanquillo fue fundado en 2006 debido al interés de Carlos Monsiváis por compartir su colección privada. ¡Y lo hizo en vida! Qué bueno que alcanzó, por decisión propia, a compartir sus excéntricos tesoros.
Tan solo 4 años después de la fundación del Museo del Estanquillo, el escritor chilango murió a los 72 años de edad. Lo que él quería era compartir su gran colección con todas las personas. ¿Cómo lo haría? A través de diversas exposiciones que mostrarán su colección en un despliegue museístico coleccionista.
Crónica de un escritor chilango
Para conocer más de la colección privada de una persona vendría bien conocer más de su historia personal. ¿O sería al revés? ¿Será que a través de su colección privada podemos conocerle más? Sea el huevo o sea la gallina, la colección privada de “Monsi”, como le decían de cariño, es un lujo. Era quizá Carlos Monsiváis uno de los chilangos más entusiasmados en el arte del “hallazgo”.
Monsiváis nació en la CDMX el 4 de mayo de 1938. Estudió en la Escuela de Economía y en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México. Chilango de corazón arcoíris, amante de los gatos (tenía 13 en su casa), escritor prolífico de un gran sentido del humor, todo eso y más era “Monsi”.
Lo mismo soltaba la pluma con una crónica que con una colección de aforismos. Él le entraba al quite con todo: hablar de fotografía, cine, arte, política, vida cotidiana de ‘chilangueces’ que la banda chilanga conocedora domina. “Monsi” era un intelectual invaluable.
A todo esto… ¿qué es un estanquillo?
Se les llamaba “estanquillos” a aquellos pequeños comercios que datan de principios del siglo XIX en donde encontrabas de todo. Es lo que hoy conocemos como una tienda miscelánea ¡pero aun más diversa! Es precisamente de la diversidad de lo que puedes encontrar en “un estanquillo” que este museo recibió su nombre.
La analogía a un estanquillo no es solo metafórica ante la diversidad de la colección que alberga. ¡No! El propio edificio en donde hoy se encuentra el Museo del Estanquillo fue muchas cosas antes de ser museo. Desde una joyería hasta una discoteca (se llamaba “La Opulencia”) y un despacho de abogados, todo eso fue. El hoy “Estanquillo de Monsi” alberga joyas pero de otro tipo: culturalmente históricas. ¡E históricamente culturales!
Sabías que… “La Esmeralda” era la joyería más famosa de la época. ¡El edificio fue construido en 1890! Así que por sí solo, el edificio ya tiene mucha historia.
Cachivaches no, tesoros sí
Todo se parece a su dueño. No por nada le decían a Monsiváis que era “el ajonjolí de todos los moles”. Pues más o menos así también es su colección. ¡Diversa y chilanga como él! Decían que lo que más le molestaba era la intolerancia. Esto quizá tenía una razón de ser. Todos los colores del arcoiris estaban posados en “Monsi”. Siempre fue un amoroso integrante de la comunidad LGBTIQA+. No solo la intolerancia hacia la diversidad le molestaba sino al uso de la fuerza sobre la libertad de pensamiento. Monsiváis participó abiertamente en el movimiento estudiantil de 1968 que culminó en la Matanza de Tlatelolco.
Si visitas el Museo del Estanquillo podrás conocer de cerca todas las pasiones de este intelectual chilango. No puedes dejar de ver las exposiciones temporales que llegan a este museo.
Pero mucho menos dejes de ver las fotografías del cine de oro en México, los afiches de época, memorabilia de rumberas y pachucos. ¡No te pierdas la Sala de Lectura del Museo del Estanquillo conformada por la biblioteca personal de Monsi!
¡Vaya joyas!
Esta “colección de colecciones”, como suelen referirse a ella, comenzó con un dibujo de José Miguel Covarrubias “El Chamaco”. El coleccionismo de Monsiváis continuó durante cuatro décadas, siempre buscando “el hallazgo” entre tianguis y lugares de viejo como La Lagunilla o el Bazar del Ángel.
Si preguntas por el acervo fotográfico podrás encontrar autores como: Hugo Brehme, Nacho López, Héctor García, Guillermo Kahlo, Agustín Jiménez y Armando Herrera.
¿Ya te dieron ganas de visitarlo? El Museo del Estanquillo se localiza en el edificio “La Esmeralda”, justamente en la esquina de las calles Isabel La Católica y Madero, en el mero corazón chilango del Centro Histórico.
Dónde: Isabel La Católica 26, Centro Histórico CDMX
Horario: Mié-Lun 10:00 a 18:00 hrs.
Costo: Entrada libre
Lo imperdible: Visita las cenizas de Carlos Monsiváis en la Sala de Lectura del Museo del Estanquillo. Su familia decidió que el mejor lugar de descanso para el escritor y coleccionista chilango sería el museo que alberga su colección. A la urna que contienen sus restos le llaman aquí “gaturna”… ¡hecha por el mismísimo artista Francisco Toledo!